Música en el fútbol
El grupo de rock argentino «Las pastillas del abuelo» dedicó en su día una canción a Diego Armando Maradona. Invoca y rememora aquella hazaña de la Selección Nacional de Argentina, con «El Pelusa» como líder, en el Mundial de México 86 y la repercusión que tuvo en la sociedad civil del país.
Letra de ¿Qué es Dios?, de «Las pastillas del abuelo»
¿Qué es Dios?
Bajó una mano del cielo y acariciando su pelo rulo
y señal de la cruz.
La caricia de Jesús hizo posible el milagro.
Convirtió la red en tierra, del balón hizo palomas
que aterrizaban su paz en la isla Soledad
borrando una absurda guerra.
Judas no juega esta tarde, lo expulsaron por traidor
y once apóstoles de Cristo con sus oídos al cielo
consultándole al señor.
Y Jesús dijo me voy, de tácticas ya no hablo
pero un consejo les doy: la pelota siempre al diez
que ocurrirá otro milagro.
El diez susurro a su oído: novia eterna ven conmigo,
te llevare de paseo que nos verá todo el mundo
y sabrán cuánto te quiero.
La pelota enamorada, blanca piel inmaculada,
se entregaba sin pudor a su flor de terciopelo
de su eterno gran amor.
El gran as de baile comenzaba su paseo
sobre la silueta lento convertía a los rivales
en estatuas de cemento.
Gran amante por doquier, danza el diez con su mujer.
Caricias besos y abrazos, el diez haciendo el amor,
y el orgasmo fue un golazo.
Rojo el sol gritaba gol, sus rayos brazos en alto
y Jesucristo a los saltos festejaban la proeza
del señor diez y su alteza.
Otro vuelo de palomas, raudo viaje hacia el sudeste.
Soberanía argentina. Banderas blanquicelestes
adornan la gran Malvina.
Premios Nobel de la Paz, desde México a Fiorito,
de Malvinas a Inglaterra que este loco diez bajito
llenó de risas la tierra.
Ya son risas que laten viendo en el diez al compadre,
genera risa latente, su risa en todas las fotos
de los hijos combatientes.
Y Jesús dijo me voy, de tácticas ya no hablo
pero un consejo les doy: la pelota siempre al diez
que ocurrirá otro milagro.
Gran amante por doquier, danza el diez con su mujer.
Caricias besos y abrazos, el diez haciendo el amor,
y el orgasmo fue un golazo.
Por tus milagros a mano y el milagro de tus pies.
Por tus milagros a mano y el milagro de tus pies.
Muchas gracias señor Dios.
Muchas gracias señor diez