La Policía Nacional detiene a un ex empleado de la Federación Valenciana de Fútbol por sustraer datos de árbitros

Estafa a árbitros de fútbol

Una vez que dejó de trabajar para la Federación habría manipulado las cuentas bancarias en las que los árbitros cobraban sus honorarios

Estafa a árbitros de fútbol | Agentes de la Policía Nacional han detenido en Valencia a un hombre de 41 años, de origen español, como presunto autor de un delito de daños en el sistema informático y base de datos de la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana, así como por los delitos de estafa y usurpación del estado civil.

El sospechoso había estado empleado en dicha federación deportiva y, tras ser cesado, se habría aprovechado de los conocimientos adquiridos en ese trabajo para sustraer datos de identidad y bancarios de los árbitros federados y, posteriormente, cometer estafas en diferentes comercios.

Las investigaciones se iniciaron tras la recepción de varias denuncias de particulares. Ponían en conocimiento de la Policía Nacional la contratación de tarjetas bancarias a su nombre; así como cargos fraudulentos en sus cuentas.

82 cuentas bancarias manipuladas

Los agentes comprobaron que en los hechos denunciados el modus operandi era el mismo; averiguaron que todas las víctimas tenían algún vínculo con la Federación de Fútbol de la Comunidad Valenciana. La Federación denunciaba la manipulación de 82 de las cuentas bancarias en las que los árbitros cobraban sus honorarios.

En el transcurso de las investigaciones los policías a través de los accesos a las bases de datos y compras realizadas han averiguado, solo un mes después de producirse los hechos, que el sospechoso pudiera ser un antiguo empleado de la Federación con conocimiento del sistema informático; que tras cesar en su puesto de trabajo aprovechó para modificar datos de cuentas bancarias; además de capturar datos de identidad y bancarios de los afectados. Los empleaba para adquirir material electrónico mediante estafa en comercio que posteriormente vendería fuera de los cauces legales.

El detenido, con un antecedente policial, está en libertad tras ser oído en declaración. Está obligado a comparecer ante la autoridad judicial cuando así lo requieran.