La espectacularidad de este gol y la definición acrobática del mismo bautizó a Cruyff como «El holandés volador»
El gol de Cruyff a Reina | Johan Cruyff acababa de llegar al fútbol español y al FC Barcelona en concreto. La liga española 1973-74 iba a contar con el, entonces, mejor jugador del mundo. En su sexto partido como azulgrana, pues su fichaje se retrasó hasta el punto de no haber hecho la pretemporada, jugado el 22 de diciembre de 1973, marcó el que muchos llamaron «un gol imposible»; que sirvió también para que algunos le llamaran desde entonces «El holandés volador».
La sociedad española de la época acababa de vivir dos días antes un atentado de ETA que marcaría parte de la historia de la transición en nuestro país. la organización terrorista voló el coche del almirante Carrero Blanco, presidente del Gobierno con un General Franco en funciones de Jefe de Estado.
El Atlético de Madrid de Toto Lorenzo visitaba el Nou Camp como campeón de liga. Los colchoneros tenían un buen conjunto, destacando su ataque formado por la tripleta Ayala, Gárate y Becerra, su cerebro Luis Aragonés y su portería defendida por Miguel Reina, padre de Pepe Reina. Se dio la circunstancia de que Reina jugaba por primera vez contra su exequipo; defendió el marco del FC Barcelona desde 1976 hasta 1973.
El gol de Cruyff a Reina
Así lo relata el FC Barcelona desde su página web oficial:
Johan Cruyff anotó en el Camp Nou su gol más espectacular con la camiseta del FC Barcelona. Fue en un partido de Liga contra el Atlético de Madrid, en un estadio abarrotado y tras una acrobática acción que dejó a todos con la boca abierta, incluso el portero colchonero, Miguel Reina, que no reaccionó ante la imprevisible pirueta del holandés.
Así lo explicó ‘El Mundo Deportivo’: «Estaba a punto de terminar el primer tiempo, cuando un centro largo, larguísimo de Rexach, parecía que se iba a perder por la línea de fondo. Pero Cruyff, en un acrobático e increíble esfuerzo, logró desviar la pelota e inverosímilmente, abatir Reina. Fue el delirio del estadio». Fue el 1-0 a los 43 minutos de juego.
Después, en la segunda mitad, llegaría el 2-0, obra de Rexach, y más tarde el 2-1 de Gárate, que cerraría el marcador. El Barça seguía su racha en la Liga y, una semana más, quedaba en lo alto de la tabla.
Desde que había debutado Cruyff, el equipo había resucitado y, en poco tiempo, había dejado la tierra de nadie para escalar hacia la primera posición, que ya no dejaría hasta cantar el alirón.