Diez días de locura para el último baile de fichajes

Lewandowski

El Paris Saint Germain quiere a Rakitic y Busquets. El Borussia de Dortmund a Paco Alcácer y hay quien sigue viendo en el Madrid a Lewandowski

El mercado de fichajes de la Liga 2018-19 en el fútbol español está dando sus último coletazos. Quedan tan solo diez días para que se cierre el plazo; en concreto el viernes 31 de agosto, a las 23:59 horas.

Diez días que van a ser una auténtica locura, como viene siendo habitual en otras temporadas pasadas. Los mismos que la Ligue 1 de Francia o la Bundesliga alemana que agotan también el plazo el próximo día 31, aunque en la liga de Alemania adelantan la hora de cierre a las 18:00 horas.

Los otros dos campeonatos de referencia europeos ya han finiquitado la posibilidad de fichar. La Premier League de Inglaterra cerró el 9 de agosto y la Serie A de Italia lo hizo el pasado sábado 18.

El croata Ivan Rakitic interesa al Paris Saint Germain como pieza de refuerzo para su centro del campo. Si no hubiera acuerdo entre todas las partes, cabe destacar que la cláusula de rescisión de Rakitic es de 125 millones, cantidad muy asequible para el mejor equipo de Francia en la actualidad.

Otro órdago del Paris Saint Germain pone más nerviosa a la familia azulgrana. Quieren a Sergio Busquets. Sería una manera de paliar los intentos de traer a sus filas a Pogba y Kanté.

El valenciano Paco Alcácer parece que tiene su salida anunciada del FC Barcelona, equipo en el que no ha logrado la titularidad en las dos temporadas que ha estado con los azulgranas. Está claro que el jugador no tiene cabida en el once de Valverde, hecho que no ha pasado desapercibido al Borussia de Dortmund. A los alemanes parece ser que sí les gusta la opción del delantero español.

Por último, hay madridistas que aún tienen esperanzas de ver a Lewandowski de merengue. El Bayern de Múnich hará lo imposible para que el jugador polaco cumpla su quinta temporada con los bávaros. No obstante, según ha declarado el presidente Uli Hoeness, lo tienen todo atado menos al agente del futbolista. Es el único fleco que queda suelto. En estos diez días de locura, la solución.